Múltiples zonas inundadas y deslizamientos de terreno provocados por las fuertes lluvias que afectan a Puerto Rico debido al paso de una vaguada provocaron, este martes, el cierre de varias carreteras, informaron las autoridades.

La Oficina de Prensa del Municipio de Ponce informó, a las 9:00 p.m. de este martes, que personal de la Policía Municipal, de la Oficina Municipal para el Manejo de Emergencias (OMME) y la Directoría de Infraestructura, Ambiente y Transportación (DIAT) atienden un desprendimiento de terreno en el camino Santa Rosa del barrio Guaraguao. El ayuntamiento añadió que el deslave mantiene el camino cerrado, lo que aisló a varias familias.

“Junto a los compañeros de OMME, hemos atendido varias situaciones, como el árbol que obstruyó el paso del agua en el vado del sector Las Jaguas del barrio Marueño, dejando incomunicadas a varias familias. Así mismo, el vado de la carretera PR-505 tuvo que ser cerrado por un caso similar, mañana pasaremos a despejarlo para mitigar lo que siempre ocurre cuando el río Bayagán crece y baja con tantos escombros. Por lo pronto, la PR-1 a la altura del sector Buyones se mantiene abierta”, indicó Fernando Borrero, director de la DIAT.

Mientras, el Negociado de la Policía informó, durante la tarde, que personal adscrito al área policíaca de Utuado trabaja con varios derrumbes provocados por las condiciones inestables de los terrenos.

“En las últimas horas nuestro pueblo ha recibido mucha precipitación. Tenemos partes de nuestras carreteras estatales afectadas como también muchos caminos municipales y residencias afectadas. Nuestro personal se encuentra en la calle atendiendo cada situación durante esta emergencia”, comunicó la Policía Municipal en una publicación en Facebook.

Como resultado, la Uniformada anunció el cierre de las siguientes vías:

Por su parte, la carretera PR-2, en dirección de Barceloneta hasta Manatí, permanece cerrada puesto que el río Grande de Manatí se salió de su cauce, “quedando intransitable en ambas direcciones”.

La agente Elma Alvarado Alvarado, oficial de prensa de la Comandancia de Arecibo, indicó a El Nuevo Día que, hasta el momento, no se ha reportado ninguna persona afectada.

Personal de la OMME y agentes de la Uniformada trabajan con la situación.

Mientras, en horas de la noche, según un comunicado de La Fortaleza, el Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), así como la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT), indicaron sobre el cierre completo o parcial de las siguientes vías:

De igual forma, la PR-105 y la PR-128 en Maricao fueron clausuradas tras reportes de deslizamiento.

La Policía exhortó a los ciudadanos a que transiten con precaución y opten por vías alternas, las cuales no precisaron.

En tanto, el comisionado del Negociado para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (Nmead), Nino Correa Filomeno, informó que, a raíz de las lluvias, atienden varias situaciones provocadas por inundaciones.

“Todo el personal del Nmead y sus zonas están activadas, en comunicación constante con jefes de agencias, alcaldes y sus directores de las Oficinas Municipales para el Manejo de Emergencias. Lo más importante es que las personas se mantengan en lugares seguros y que no crucen vías inundadas. Seguimos trabajando para salvar vidas y propiedades”, expresó en un comunicado Correa Filomeno.

Desde la semana pasada, múltiples regiones de Puerto Rico han sido impactadas por un patrón de fuertes lluvias asociado a una vaguada que se desplaza por la región.

El pasado lunes, fuertes lluvias afectaron a varios municipios durante la tarde. Esto redundó en advertencias de inundaciones para varios pueblos como: Sabana Grande, San Germán, Hormigueros, Guayanilla, Mayagüez, Yauco y Peñuelas en la zona oeste y suroeste, así como pueblos del norte y el interior de Puerto Rico como Naranjito, Morovis, Corozal, Dorado, Toa Alta, Toa Baja, Vega Alta y Vega Baja.

Este martes, el Servicio Nacional de Meteorología (SNM) advirtió que esperaban de dos a cuatro pulgadas de precipitación general. A causa de la lluvia.