Puerto Rico Terminals reconoció que el ciberataque reportado el sábado, 20 de abril, ha afectado sus operaciones en el puerto de San Juan y producido retrasos en la entrega y recogido de carga, pero el consorcio indicó, en declaraciones escritas, que tomó medidas para mitigar el impacto y negó que el o los ciberpiratas tuvieron acceso a información sensitiva sobre clientes o de sus negocios.

El consorcio, compuesto por las empresas Luis Ayala Colón y Puerto Rico Terminals, sostuvo que el 20 de abril enfrentó dificultades operacionales como consecuencia de un ataque mediante ransomware que afectó las computadoras de la terminal de forma temporera.

Un ransomware, en informática, es un tipo de malware o código malicioso que impide el uso de los equipos o sistemas que infecta al encriptar o cifrar los datos almacenados. Usualmente, el o los atacantes solicitan el pago de un rescate para desbloquear la información. A través de este tipo de ataque se busca causar daños, deshabilitar o dar acceso a una persona no autorizada a dispositivos electrónicos y, en muchos casos, hurtar información sensitiva, según datos publicados por el Servicio de Innovación y Tecnología (PRITS).

“Hemos estado trabajando arduamente, en conjunto con expertos y agencias pertinentes, para asegurarnos de contrarrestar los efectos de esta actividad cibernética ilegal y devolver la normalidad a todas las etapas de la operación lo antes posible”, indicó Clarivette Díaz, gerente general de Puerto Nuevo Terminals, en el comunicado de prensa.

Díaz precisó que las operaciones de la terminal no se han detenido desde que ocurrió el incidente y añadió que la “terminal ha estado operando sin cesar todos los días, tanto en lo que concierne a la operación de los barcos como a la entrada y salida de contenedores”.

La ejecutiva aclaró que ninguna información sensitiva sobre clientes o de negocios estuvo expuesta o vulnerable a raíz del incidente. Explicó que, para evitar un mayor disloque de la actividad, el personal sigue trabajando y se extendió la apertura de los portones para atender el volumen de tráfico de camiones.

“Esta situación, sin duda, ha afectado las operaciones de nuestra terminal y ha producido retrasos inusuales en el tiempo que les toma a los clientes entrar y salir de la instalación. No obstante, a tono con nuestro compromiso, hemos trabajado de la mano con todos los importadores y empresas de transporte terrestre y establecido horarios extendidos para mitigar el impacto en sus operaciones diarias”, explicó Díaz.

El 25 de abril, Joel Pizá Batiz, director ejecutivo de la Autoridad de los Puertos, confirmó a El Nuevo Día que el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) colabora con la investigación del ciberataque. En ese momento, Pizá Batiz explicó que “al ser un ciberataque, es un delito federal y por afectar el comercio interestatal, le corresponde a ellos identificar esas personas y por eso el FBI está a cargo de esa gestión”.

Puerto Rico Terminals reconoció que, con la desestabilización de la operación a raíz de este incidente, hubo tiempos de espera atípicos.

La empresa indicó que, aunque en este momento el trámite está demorando más de lo usual, con las medidas que se tomaron se logró estabilizar la operación y se espera que para el fin de semana esté totalmente normalizada la actividad en la terminal.

Además, la compañía aludió a que las agencias reguladoras reconocieron el trabajo exitoso en el restablecimiento del sistema del terminal y la velocidad con la que se han reanudado las operaciones, lo que a su entender es un logro significativo en comparación con los estándares de la industria, lo que proyecta “la resiliencia y dedicación” de la empresa.

En esa misma línea, Díaz agradeció el apoyo de las agencias reguladoras y al personal unionado, supervisores y gerenciales por trabajar incansablemente para asegurar que se mantuviera el flujo de carga para que no se afectara el recogido y distribución de productos y suministros.

“A nuestros clientes también les agradecemos la comprensión ante esta inusual situación. Nos comprometemos a mantenerlos informados para mitigar cualquier impacto en sus operaciones”, concluyó la gerencial, en el parte de prensa.